Publicado por Dr Javier: 8 julio, 2025
Ultima actualización de este artículo: Hace 1 min por Dr Javier
Si buscas una forma eficaz de eliminar restos de comida y bacterias que se acumulan en lugares que no alcanzas con el hilo dental. Necesitas saber qué es y para qué sirve el irrigador dental. Esta herramienta se adapta a todo tipo de personas y te ayudará a mejorar tu salud bucodental.
¿Qué es un irrigador dental?
Un irrigador dental o bucal, también conocido como waterpik, es un dispositivo electrónico sencillo de higiene bucodental. Muy parecido al que emplean en clínicas dentales profesionales.
Esta herramienta expulsa chorros de agua a presión por una boquilla especial con el fin de eliminar restos de comida, placa y bacterias. Es ideal para alcanzar zonas de difícil acceso entre los dientes y debajo de la línea de las encías.
Los irrigadores dentales son muy usados por personas con ortodoncia, prótesis dental, puentes y con problemas en las encías.
Para qué sirve el irrigador dental: Principales beneficios
Eliminación de placa y restos de comida
El chorro de agua a presión que expulsa el irrigador remueve restos de comida, placa y bacterias de manera eficaz. Además, alcanza zonas de difícil acceso para el cepillo e hilo dental.
Mejora de la salud de encías y reducción de sangrado
El irrigador elimina la placa bacteriana que se acumula debajo de la línea de las encías. Esto es una forma de bajar la inflamación de las encías rápidamente. También previene la gingivitis y otras enfermedades periodontales.
Adicionalmente, favorece el flujo sanguíneo de las encías. Lo que te ayudará a tener una recuperación más rápida y evitar el sangrado del tejido en caso de presentar una ligera infección en esta zona.
Ventajas frente al hilo dental tradicional y cepillos interdentales
Los irrigadores dentales limpian profundamente zonas que con hilo dental y cepillos interdentales son difíciles de alcanzar. Además, permite limpiar las encías y espacios interdentales de forma menos invasiva. Lo que los hace una alternativa ideal para personas con encías sensibles.
Es un método práctico que se adapta a pacientes con ortodoncia como los brackets transparentes, implantes, o cualquier otra rehabilitación dental.
Uso complementario con el cepillado
Una excelente forma de lograr una higiene bucal óptima es complementar el cepillado con el uso del irrigador. Así eliminas cualquier resto de comida y placa que haya quedado.
Tipos de irrigadores dentales
Los irrigadores se pueden clasificar en diferentes tipos.
De mesa vs. Portátil
Los irrigadores de sobremesa son los más populares. Se usan principalmente en hogares, ya que funcionan con electricidad y por lo general cuentan con un depósito de agua grande. Poseen múltiples niveles de presión de agua y diferentes boquillas, lo que garantiza mejores resultados.
Por otro lado, los irrigadores portátiles funcionan con baterías y son fáciles de transportar, lo que los hace ideales para viajes. Pero considera que la presión de agua es menor que la de los de sobremesa.
Características principales
Los irrigadores dentales se pueden clasificar por la tecnología del chorro de agua y boquilla en los siguientes tipos:
- Chorro pulsante: emplea un chorro de agua en ráfagas que limpia y masajea las encías.
- Chorro continuo: el flujo de agua para el chorro es constante y menos intenso que el de chorro punzante. Es ideal para personas con encías sensibles.
- Tecnología air floss: se combina aire y agua en un mismo chorro para limpiar la placa bacteriana.
Modelos para ortodoncia, implantes o encías sensibles
Muchos irrigadores dentales poseen boquillas especializadas para personas con necesidades específicas, por ejemplo:
- Ortodoncia: La boquilla tiene un ángulo especial para limpiar muy bien entre los dientes y los brackets. Tiene un ángulo de aproximadamente 45°.
- Implantes y prótesis: la boquilla por lo general es de punta blanda, ideal para personas como prótesis fijas sobre implantes y cualquier otra rehabilitación dental.
- Encías sensibles: El irrigador debe tener una boquilla periodontal y presión suave. Lo recomendado es que sea de chorro continuo.
¿Cómo se utiliza correctamente?
Preparación del dispositivo
Llena el aparato con agua tibia y limpia, para mejores resultados puedes mezclarla enjuague bucal antiséptico.
A continuación, escoge la boquilla adecuada para tratar tu caso y configura la presión. Lo ideal es que empieces en modo suave y aumentes progresivamente.
Técnicas y pasos a seguir
Para limpiar tus dientes con el irrigador bucal, sigue el contorno de las encías con el aparato y pasa por cada espacio interdental. Dedícale aproximadamente 2 segundos a cada zona.
Cuando termines, escupe el agua residual acumulada en tu boca y enjuágate con agua limpia.
Frecuencia y consejos de uso
- Usa el irrigador entre 1 y dos veces al día después de cepillarte.
- Colócale boquillas especiales dependiendo de tu caso. Existen modelos para ortodoncia, implantes y enfermedades periodontales.
- Empieza la limpieza desde los molares hasta los incisivos.
- Controla la presión.
- No compartas las boquillas.
Vida útil y recambios recomendados
Un irrigador de sobremesa tiene un tiempo de vida estimado de entre 3 y 5 años. Pero las boquillas deben reemplazarse cada 4 meses o antes en caso de que se deformen.
Por otro lado, los irrigadores portátiles duran aproximadamente 2 años debido a la degradación de la batería.
El tiempo de vida útil del aparato varía dependiendo de factores como intensidad de uso, mantenimiento, marca y otros.
Contraindicaciones y precauciones
Acumulación excesiva de agua en la boca
Si eres una persona con dificultades para tragar o controlar el flujo de saliva, no es recomendable que emplees irrigadores dentales. Ya que existe la posibilidad de que aspires agua.
Precauciones con encías sensibles o enfermedades periodontales
Si tienes infecciones activas, heridas abiertas en la boca o enfermedades periodontales avanzadas, no es recomendable usar irrigador dental. Puesto que el chorro de agua puede irritar las zonas afectadas e incluso diseminar las bacterias a otras áreas de la boca y garganta.
Para evitar lastimar las encías comienza siempre con una presión de agua suave y auméntala gradualmente. También asegúrate de tener la boquilla para cada caso y mantener informado a tu dentista que estás usando dicha herramienta.
Recomendaciones finales
El irrigador dental es un dispositivo que si se usa regularmente en conjunto con un buen cepillado y uso de hilo dental garantiza una excelente salud bucodental. Pero antes de adquirir y empezar a usar uno, te recomendamos consultar con nuestros dentistas y conocer las diferentes opciones de boquilla, presión del agua, mantenimiento y otros factores.
Ahora que sabes para qué sirve el irrigador dental y todas las ventajas que ofrece, puedes incluir el uso esta herramienta en tu rutina de higiene bucal para mejorar los resultados y prevenir enfermedades periodontales.
El Dr. Javier Ortiz de Urbina Hidalgo es un especialista en Odontología e Implantología. Con muchos años de experiencia en la rama de la Odontología y la Implantología y una gran formación en muchos ámbitos de la especialidad.